El presupuesto enmarcado en situación de crisis, debido por una parte a la caída de los
ingresos por la explosión del boom Inmobiliario y por otra las dificultades
históricas de la financiación local a nivel general.
Otro elemento que agrava el
problema del Ayuntamiento, es el Plan de Ajuste, que obliga a los ayuntamientos,
caso de Aranjuez a hacer frente a la deuda con proveedores a través de un
crédito que ha recibido del Estado.
En CCOO, creemos que este Plan de Ajuste podría haber
sido otro, y no castigar de tal manera como se ha hecho a trabajadores
municipales y a los vecinos de Aranjuez.
Con estas premisas, ha sido
elaborado el presupuesto, con el agravante de que el plan de ajuste no se ha
cumplido en el 2012, en lo referente a los ingresos. Por esta razón el presupuesto prioriza los
pagos a las entidades financieras, con una bajada generalizada de todas las
Áreas de gobierno, sin embargo los importes de las externalizaciones o
privatizaciones han aumentado y, por el contrario se ha reducido la masa
salarial de los empleados públicos.
La Deuda financiera del Ayto de
Aranjuez a corto y largo plazo a 31 de diciembre de 2012, alcanzaba los 75,3
millones de euros. Se espera que la deuda a 31 de diciembre de 2013, se sitúe
en 72,5 millones de euros. El nivel de endeudamiento rebasa los límites fijados
por el Ministerio Economía.
Resaltar que los ingresos
previstos no se han producido pese al incremento de tasas, eliminación de
bonificaciones, lucha contra el fraude, etc. La solución del equipo de gobierno
ha sido seguir reduciendo el gasto en personal y servicios a los ciudadanos,
eliminando la inversión o eliminando empresas municipales. Sin embargo el
equipo de gobierno ha ampliado sus liberaciones y el gasto de algunos servicios
privatizados se ha incrementado según los ingresos liquidados, lo efectivamente
recaudado.
Desde CCOO, entendemos que se debe recuperar
la aportación de la Comunidad de Madrid, al mismo nivel que en el año 2009, que
aportarían 2 millones de euros más. Eliminar las bonificaciones al ICIO y a las
Licencias Urbanísticas para la
construcción de viviendas en el casco antiguo, que aportarían otros 300.000 €.
Además de aumentar el IBI a las rentas superiores y reducirlo a aquellos
colectivos que más lo necesiten. En CCOO compartimos alguna rebaja de tasas e
impuestos pero no de manera generalizada, sino en función de capacidad
económica del contribuyente.
Desde CCOO, creemos que la fiscalidad
municipal, debe tener en sí misma un componente de reequilibrio social, siendo
la única garantía tanto de la existencia de servicios públicos como de garantía
de su calidad. Para ello, es necesario
un nuevo pacto local, en materia de competencias locales muchas de ellas
actualmente ejercidas, de manera “impropia”, por los municipios. Siendo evidente,
que para alcanzar este marco de competencias locales, el sistema actual de
imposición local no se adecua a estas nuevas necesidades, por lo que se exige,
una reforma como la que proponemos, con
una mayor vinculación entre fiscalidad local y variables económicas más
flexibles como son la renta y el consumo.